Aún con el sabor de boca agridulce que nos deparó el partido ante el líder, ahora hay que afrontar una auténtica final ante el Gimnástico de Alcázar. Un duelo que vienen en un momento crítico para ambos. El Daimiel es cuarto por la cola, primer equipo que se salvaría, con 7 puntos. El Gimnástico es vicecolista con conco puntos. Si el Daimiel pierde o empata podría caer a posiciones de descenso a Regional. Con el Gimnástico llegará Pepe Berja, el centrocampista que salió de mala manera del Daimiel CF, con fuertes declaraciones incluidas, y que desde luego dará el todo por el todo en este partido. Ya sucedió con Ruma, el central que no gustó a Kiko Peña, se enroló en el Torrijos y fue el autor del gol torrijeño en el primer partido de Liga.
Las secuelas que ha dejado el partido contra el Carranque son la baja por sanción de Quesada, que acumuló su quinta amarilla por lo que tiene un partido de sanción, y la lesión de Valdivia, que ha vuelto a recaer de su lesión de tobillo tras una entrada por detrás que no fue castigada con amarilla. Valdivia se encontraba muy apesadumbrado porque había retornado a los terreno de juego en Hellín y ha vuelto a ver truncada su progresión. Sin embargo lo que más preocupa al delantero de Puertollano es que no dan con el quid de su dolencia, por lo que le van a volver a realizar una ecografía para determinar el alcance de la lesión.
Sin Quesada por sanción y sin Valdivia por lesión, serán tres las bajas para recibir al Gimnástico, porque Juanpe aún no se ha recuperado de su rotura fibrilar y seguirá en el dique seco una semana más. Como quiera que la plantilla sólo es de 16 futbolistas (recordamos que Jesús no aparece por los entrenamientos por razones que sólo él sabe), pues Kiko Peña tiene a su disposición a 13 jugadores, por cuanto Dani sí podrá jugar al cumplir su partido de sanción ante el Carranque.
Se necesitan fichajes y el "Caso Fernando"
En el horizonte se prevé que por lo menos dos juveniles tendrán que ser convocados, tal y como pasó el domingo pasado con Adri y Mochu, e incluso Kiko Peña no descartaría a un juvenil más. Está más que claro que se necesitan dos refuerzos, copmo mínimo. Un lateral izquierdo y un medio centro, pero la economía no está para tirar cohetes y los que vengan han de ser de la provincia. Se habló de Fernando, el canterano que comenzó la Liga en el Atlético Teresiano. Sin embargo, y pese a que el presidente llegó a un acuerdo para la incorporación del futbolista, no ha sentado bien en el seno del cuerpo técnico el hecho de que Fernando eligiera marcharse al Villarrubia a probar durante 15 días cuando decidió abandonar el Teresiano, en vez de hacer esa misma prueba en el Daimiel.
El cuerpo técnico del Daimiel CF considera que Fernando debería haber aceptado entrenar con el Daimiel cuando se le llamó, hace quince días, pero el jugador prefirió irse al Villarrubia porque, en aquél momento, creyó que no iba a probar, sino a fichar directamente por el club blanquiazul como uno más de la plantilla. Sin embargo eso no ocurrió porque después de quince días entrenando con el Villarrubia, los blanquiazules decidieron no firmar a Fernando, y sí fichar a dos jugadores brasileños. Así que, de momento, Fernando se encuentra sin equipo, aunque Kiko Peña nos comentaba que no le ha cerrado la puerta. No lo debería hacer, desde luego, porque Fernando tiene una enorme proyección, cuenta con el apoyo del presidente, es sub 23 y además, el Daimiel CF tiene una deuda moral con el chaval después de la gravísima lesión que sufrió defendiendo la camiseta blanca del juvenil y que le tuvo apartado más de un año de los terrenos de juego.
Fernando se pudo equivocar al marcharse al Villarrubia, lo mismo que el cuerpo técnico se ha equivocado con la llegada de determinados futbolistas. Bueno sería contar con un canterano, que falta le hace a este Daimiel que, por lo que sea, no sabe aprovechar los buenos jugadores que salen de la cantera. Dialogando se entiende la gente.
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