jueves, 17 de diciembre de 2009

El Daimiel juega su último partido del año en casa esta noche ante el Socuéllamos. Si gana, abandonará el farolillo rojo


Daimiel y Socuéllamos se enfrentan esta noche (20:00, Estadio Municipal), con motivo de la 17ª jornada en Tercera división. El partido se juega hoy jueves, y no ayer miércoles, como en un principio estaba previsto, y como se jugaron los cuatro partidos que lo pudieron hacer por las condiciones meteorológicas, porque la directiva daimieleña optó por cambiar el día del partido al haber colocado la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Daimiel la celebración de la Gala Anual del Deporte en el día de ayer. La decisión de la directiva, lógica, por otra parte, tuvo que contar con el beneplácito del Socuéllamos. Si no, el partido se hubiera tenido que disputar ayer y el club daimieleño podría haber salido perjudicado en cuanto a asistencia de público.

Por otro lado, el estado del césped será una incógnita. El lunes nevó toda la mañana, pero ni el martes ni el miércoles, pese al intenso frío, lo hizo. Probablemente a la hora del encuentro, el césped se encuentre duro o, en su defecto, embarrado, pero todo dependerá de cómo evolucione la climatología hoy jueves.

Más pendientes de cuestiones extradeportivas
Pese a la enorme importancia del choque, en el Daimiel se está más pendiente de lo que pueda pasar con el entrenador, Kiko Peña, y la denuncia de su contrato ante la Federación, junto al acto de conciliación fijado para el día 22 de diciembre, como adelantó www.futboldedaimiel.blogspot.com, que del partido de esta noche.

El Daimiel dejó buena imagen en La Roda, y por eso es perentorio que los que rigen el Club caigan en la cuenta de que se debe arreglar de forma inmediata el asunto del técnico. De nada vale dilatar el proceso, y Eusebio Villar ya lo sabe porque lo sufrió, sin ir más lejos, con Salvador Malagón. Y de nada servirá obligar al retorno a Kiko Peña, porque ni lo va a hacer el técnico ni sería la solución a los problemas deportivos del Club.

Total, que si el presidente quiere la salvación deportiva del Daimiel CF, lo que tiene que hacer es cerrar el asunto del entrenador ya, con un cese efectivo del técnico y que luego, más adelante, sean los tribunales los que tengan que dirimir el resto de cuestiones, si es que hay algo que dirimir en ellos. Otras soluciones no son buenas ni deportivamente, ni para la imagen del Daimiel CF.

Se recupera a tres jugadores
Así las cosas, el entrenador del Daimiel juvenil, Joaquín Calahorra será, de nuevo, el técnico que dirija al Daimiel desde el banquillo. En esta ocasión contará hasta con 14 jugadores de la primera plantilla, ya que sólo son bajas Carlos García y Fran Blasco, ambos por lesión en los tobillos. En el caso de Fran Blasco el alcance de su dolencia es menor de lo que parecía. Tiene un esguince de grado dos, pero nada roto. La zona la tiene amoratada e inflamada. Incluso quería jugar el partido, pero la prudencia estima que hasta después de Navidad no vuelva a los terrenos de juego.


Por su parte Carlos García se lesionó en Talavera de la Reina, y, pese a que jugó todo el partido ante el Quintanar del Rey, sus molestias no han remitido y también está descartado hasta después de Navidad.

Por lo demás, las buenas noticias estriban en la recuperación de Juanpe, que ya entrena con normalidad, Quesada y Rubén. Corbacho, que estuvo en La Roda, pero no jugó, podría tener sus primeros minutos, aunque no es probable. Así pues Calahorra sólo tendrá que convocar a dos juveniles, que casi seguro serán Dachu, que debutó esta temporada con el Daimiel jugando 81 minutos en La Roda a un gran nivel, y Pedrero. Por cierto que con los debuts de Dachu y Paco el pasado domingo en La Roda, son ya 41 los futbolistas que han vestido esta temporada la camiseta del Daimiel en partidos amistosos, Copa Diputación y Liga.

En cuanto a la alineación, la más probable sería la compuesta por Ruiz Caba, Jaime Núñez, Pablo Jódar, Juanpe, Noel, Quesada, David Ruiz, Armindo, Naranjo, Valdivia y Rubén. Para el banquillo quedarían Astillero, Paco, Corbacho, Dachu y Pedrero.

Un rival enrachado
Si el Daimiel lleva desde el 1 de noviembre sin ganar, día aquel en que se derrotó al Mora (1-0), el Socuéllamos es al revés, llevan desde ese 1 de noviembre sin perder, habiendo conseguido dos victorias y tres empates. Esta buena racha ha colocado al Socuéllamos, cuyos jugadores son todos de Madrid, en la undécima posición con 22 puntos (antes de jugarse los partidos de ayer), diez puntos más que el Daimiel que es el colista.


Sin embargo el balance de goles a favor y en contra no es muy diferente. El Daimiel ha marcado 16 goles, mientras que el Socuéllamos, 18. Por el contrario el Daimiel ha encajado 26 y el Socuéllamos, 25. Los socuellaminos han perdido seis partidos fuera de casa: Azuqueca (5-0), Talavera (1-0), La Roda (2-0), Carranque (5-0), Albacete B (3-1) y Piedrabuena (3-2). Pero en sus dos últimas salidas consiguieron ganar en Tomelloso (0-1) y empatar en Illescas (1-1).
Será el séptimo Daimiel-Socuéllamos en Tercera división y lo cierto es que al Daimiel se le da bastante bien este equipo, ya que se le ha ganado en tres ocasiones, se empató en otra y solo se ha perdido en dos ocasiones, hace ya tiempo, en las temporadas 1990/91 (0-2) y 1991/92 (1-2).
El partido es muy importante y se necesita el concurso de una afición que debe estar con el equipo más que nunca.


Se puede salir del farolillo rojo

Tras la derrota anoche del Gimnástico de Alcázar en su campo ante La Roda (0-1), si el Daimiel gana esta noche al Socuéllamos, el equipo blanco dejaría de ser el colista porque aventajaría en un punto a los alcazareños que cuentan con 14 puntos frente a los 12 que atesora el Daimiel. Además quedaría a tres puntos de la salvación que marca el Quintanar del Rey, un equipo que no jugó su partido ante el Villarrobledo, antepenúltimo en la tabla, por las nieves caídas en la ciudad albaceteña.

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