El primer recuerdo de Abigail Gómez-Cambronero (Daimiel, Ciudad Real, 28 años) es con 2 años y se ve a sí misma vestida con la camiseta del Athletic. Abigail, que se presenta como la más forofa de una familia de forofos rojiblancos, cogió el sábado dos bufandas. Le colocó una a su novio, Santiago Calvo-Calderón (33 años), y se lo llevó desde su ciudad natal a Sevilla. Quinientos kilómetros con un objetivo: hacerse una fotos con los jugadores y llevarse algún autógrafo.
Abigail y Santiago se apostaron a la puerta del hotel Meliá Colón a las 19.30 horas de una tarde lluviosa y fría junto a otras veinte personas, llegadas algunas de ellas desde Lepe (Huelva) y Badajoz. Cerca de las nueve y media por fin apareció el autobús del equipo. Fue un 'Bienvenido Mister Marshall' en rojiblanco. Los jugadores pasaron como un rayo. Algunos pocos dedicaron unos segundos a firmar media docena de autógrafos, y adiós muy buenas.
Aunque forman parte de la peña rojiblanca de Daimiel, Abigail y Santiago están muy alejados de conocer las rutinas del Athletic. En las puertas del hotel, un empleado les informó que no habría jornada de firmas. «Hemos hecho quinientos kilómetros para llevarnos solo algunas fotos», lamentó la pareja en declaraciones a elcorreo.com. Y agregaron: «Veníamos con ganas de ver a los jugadores y entrar en el hotel. Nos ha sorprendido que no haya jornada de firmas». Como resumen, piden al club una mayor atención con estos aficionados tan alejados de Euskadi. «Quinientos kilómetros no se los hace cualquiera para tomar algunas fotos. Tienen que valorar nuestro esfuerzo».
Las últimas cuatro campañas el Athletic reservaba un salón en uno de sus hoteles de concentración para que durante media hora dos jugadores firmaran autógrafos y se fotografiaran con los aficionados de fuera de Euskadi. Bien que lo recuerdan Abigail y Santiago. «A finales de febrero fuimos a Madrid y nos llevamos las firmas, unas fotos y hasta charlamos un poco con Koikili y David López».
Sin embargo, esta campaña no se ha organizado ninguna. A preguntas de este periódico, desde el club se alega que lo que sucede es que se llega tarde a los hoteles y, por tanto, no hay tiempo para autógrafos. En San Sebastián la expedición se presentó a las cuatro de la tarde y tampoco hubo firmas. El Madrid es uno de los clubes que lleva a cabo en cada partido este acto.
Abigail y Santiago se fueron desilusionados. «Hemos venido solo a por las firmas porque tenemos que trabajar el lunes y al partido no nos podemos quedar. Quinientos kilómetros para esto...».
canalathletic.com
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