La nieve impide acabar un partido en el que el Daimiel era superior. LOS LOCALES JUGARON CON TRES JUVENILES TITULARES (1-1, suspendido en el descanso)

Si el partido entre Daimiel y Torrijos hubiera tenido que empezar media hora más tarde, a buen seguro que Villena Contreras y los delegados de ambos equipos hubiesen decidido no comenzar. Pero lo cierto es que a las 16:30, pese a que ya estaba nevando en Daimiel desde hacía una hora y media, el césped presentaba un aspecto bastante apto, aunque más de uno se temía que el encuentro no iba a finalizar, como finalmente sucedió.

En el descanso Villena Contreras estuvo departiendo con los dos delegados. Parecía que el encuentro se iba a reanudar. El colegiado quería que se limpiaran, como mínimo, las líneas de la banda y las áreas. Pero aunque dos directivos blancos así lo hicieron, con la nieve que caía, poco se podía hacer. Ni se iba a pintar de rojo las marcas, ni había balón de ese color, así que lo mejor era dejarlo.

El interés del Daimiel CF era seguir jugando, y los jugadores estaban más que dispuestos. En el Torrijos, pues no tanto. Sabedores de la crisis por la que atraviesa el Daimiel y que seguramente haya varios jugadores que no sigan a partir de esta semana en la disciplina del conjunto blanco, preferían dejarlo para otra ocasión. Pero no hay que achacar nada. La decisión fue acertada. Incluso el haberse jugado los primeros 45 minutos ya era una temeridad, porque con el paso de los minutos, las marcas de la banda ni las del área se veían con nitidez. Solo se intuían, y eso es muy malo para la buena práctica de este deporte.

Tres juveniles, titulares
Y ¿por qué el Daimiel quería seguir jugando? Pues porque se vio superior a un Torrijos que durante los 45 minutos que se jugaron no creó ni una sola acción de peligro. Eso sí, los rojiblancos, con los exdaimieleños Tato y Ruma en sus filas, botaron el primer córner del partido, a los cinco minutos, pero nada más.

Todo ello teniendo en cuenta que Rimun, que vio el partido desde la recta de enfrente de tribuna, junto a los jugadores daimieleños sancionados y lesionados Fran Blasco, Carlos García y Jaime Núñez (los cuatro, unos valientes) alineó a tres juveniles de titulares, el lateral izquierdo Pedrero, el central Rubio y al mediocentro Dachu. Los tres eran debutantes como titulares, aunque ya habían jugado minutos con el primer equipo. De hecho Dachu, que debutó en el Daimiel la pasada campaña con Torreca, lleva jugando los cinco últimos encuentros del Daimiel, y a un buen nivel. Junto a ellos debutó Negrete, en la banda izquierda, y de él fue una de las mejores acciones del partido, aunque le faltó el remate final. El otro fichaje, David López, se quedó en el banquillo sin debutar.

Rimun cumple su palabra
Rimun cumplió, de esa forma, con lo prometido. Los que entrenen van a jugar, y los juveniles convocados, tendrán su oportunidad. Así, no le tembló la mano al dejar en el banquillo a Rubén y a Valdivia. Su no asistencia a los entrenamientos no estaba del todo justificada. Es posible que más de uno piense que Rimun se equivoca, pero en las actuales circunstancias en las que se mueve el Daimiel, o hay compromiso de los jugadores y el entrenador premia el esfuerzo, o todo se va al garete antes de tiempo.

En fin que con Fran Blasco y David Ruiz sancionados, Carlos García y Jaime Núñez lesionados, y Pablo Jódar, dado de baja, resulta que la sorpresa la daba Corbacho, que, según el entrenador daimieleño, no asistió al partido por motivos de trabajo. Total que seis bajas, más dos “castigados” presentaba un Daimiel necesitadísimo ante un Torrijos en crisis de resultados y, a decir verdad, en Daimiel demostró su mal momento de forma.

Los que saltaron al terreno de juego lo dieron todo. La novedad, aparte de todo lo escrito, la daba Ruiz Caba que volvía a la portería. Muchos se sorprendieron de que Astillero no ocupara ese lugar después de su partidazo ante el Albacete B. La verdad es que el meta apenas tuvo trabajo. Los daimieleños tuvieron casi siempre el dominio del balón e incluso se permitieron el lujo de tocar en el centro del campo, pese al estado del terreno de juego. La solidaridad en el trabajo fue encomiable. Difícil destacar a alguien, pero Armindo estuvo muy activo, poniendo en serios aprietos a Amaro en las faltas, Dachu se mostró contundente en el centro del campo, Negrete parecía que estaba jugando toda la temporada y Paco se va entonando conforme pasan las jornadas.

Hubo dos ocasiones claras. La primera en el minuto 17 en un centro de Paco que remató en el segundo palo Pedrero, con la cabeza, al que respondió Mario con una buena parada, y en el 21, una falta que botó Armindo y a Amaro se le escapó el balón yéndose a córner, como muy bien pudo haberse ido al fondo de la portería. La última acción del partido fue de Quesada, que mandó un disparo desde fuera del área muy ajustado al palo.

Semana definitiva
Lo más positivo del encuentro es que sobre el blanco césped del Estadio, césped que no se va a pisar más por un problema con los hongos hasta después del 31 de enero, como mínimo, es que hubo jugando cinco jugadores de Daimiel, Pedrero, Rubio, Dachu, Paco y Negrete, cotas que hace mucho tiempo que no se alcanzaban, más otros dos muy vinculados a esta localidad, Juanpe y Quesada. La pena es que quedó la sensación de que bastantes jugadores de la actual plantilla pueden emigrar a partir de esta semana, pese a que la gestora pagó, nada más acabar el partido, lo que se les debía de gasolina.

El martes se les comunicará a los jugadores hasta dónde se puede llegar. Varios de ellos, con ofertas de La Solana, Manzanares y Villarrubia (el triunvirato que lucha por el ascenso a Tercera) están esperando a escuchar a los gestores para pedir la carta de libertad, si no les convencen las nuevas condiciones. A su vez, habrá una nueva asamblea de socios el viernes día 15 para exponer la situación del Club y su futuro.

La continuidad del equipo en Tercera división parece garantizada, aunque parece inevitable una reestructuración en la plantilla pese a que a los jugadores, al menos los consultados, les gustaría quedarse porque creen que la salvación es posible y ahora notan mucho más apoyo de la afición. Pero va a depender de la situación personal de cada uno. Sí es seguro que Rimun sigue buscando jugadores de la zona que quieran jugar en Tercera división, pero sin engañar a nadie y dando a conocer la situación real del equipo.

FICHA TÉCNICA
0 DAIMIEL: Ruiz Caba, Pedrero, Noel, Juanpe, Rubio, Quesada, Dachu, Armindo, Naranjo, Paco y Negrete.

0 TORRIJOS: Amaro, Pedro Pablo, Ruma, Luján, Aguilera (Fernando, min. 23), Sergio, Corral, Tato, Otero, Fran y Steven.

ÁRBITRO: Villena Contreras, asistido en las bandas por Albarrán Sanz y García Martínez, de la Delegación de Albacete. Decidió comenzar el partido, pese a que ya había empezado a nevar, y decidió suspenderlo en el descanso ante la persistente nevada. Mostró cartulinas amarillas por el Torrijos a Aguilera y Fran.

INCIDENCIAS: Estadio Municipal de Daimiel. Unos 250 espectadores, lo que no está nada mal, en una tarde de perros con nieve cayendo desde las tres de la tarde. El partido se suspendió en el descanso ante la evidencia de que la nieve iba a hacer imposible el perfecto desarrollo del juego.

LA FOTO DE LA AFICIÓN