lunes, 27 de octubre de 2014

Partido intenso y emocionante donde sólo faltó el gol (0-0)


Hay empates y empates, y desde luego la afición del Daimiel se fue moderadamente satisfecha porque si bien no ganó su equipo, al menos sí que mostró una imagen muy diferente a la que últimamente había mostrado. Y algo importante, se cortó de raiz la malísima racha goleadora en contra en la que había caído el equipo blanco.

Partido de esos que hacen afición aunque a los entrenadores les guste poco. Daimiel y Villarrobledo dispusieron un amplio abanico de posibilidades para haber marcado algún gol en la tarde del domingo, pero cuando los delanteros estuvieron acertados, los porteros lo hicieron mejor. Un tiempo para cada equipo, con el Villarrobledo mejor en la primera parte, y dos balones a los postes que estrelló el Daimiel como mejores argumentos para haber conseguido la victoria. El partido no tuvo tregua y los jugadores de ambos equipos acabaron exhaustos sobre el terreno de juego.

En cuanto a las alineaciones, varias cosas que anotar. En el Daimiel su entrenador Paco García-Moreno pudo haber acusado las críticas recibidas durante la semana y sólo realizó una rotación, la obligada de Adri, sancionado. En su lugar se colocó Rubio en el lateral derecho pasando Fernando al centro del campo. 4-2-3-1 en el Daimiel que no varió a lo largo del aprtido. Por su parte tres variaciones en el Villarrobledo. Su entrenador, Gabriel Ramón Florit dejaba en el banquillo al portero Garrido, señalado la pasada semana por el gol que le costó a su equipo el 0-1 ante el Mora. Le sustituyó Cristian que luego sería clave para que los roblenses se llevaran al menos un punto de Daimiel.

Samu retornaba al once inicial y el héroe ante el Mora, Ricardo, que conseguía el empate a uno en las postrimerías del partido, era recompensado con la titularidad. El nuevo fichaje, Vílchez, quedaba en el banquillo a la espera de una oportunidad que luego se produjo.

El Villarrobledo salió a por todas
Desde el primer momento el equipo de Albacete salió a por todos. Un 4-4-2 clásico con una presión tremenda en todo el campo. Al Daimiel le costaba muchísimo salir de ella y en el primer minuto de juego llegaba la mejor ocasión del Villarrobledo en todo el partido. Un centro desde la derecha de Joaquín al segundo palo era rematado de cabeza a apenas un metro de la portería por Dani Hoyos. Parecía gol irremisible, pero el esférico fue a pegar en la cara de Astillero y la defensa despejó el peligro ante un meta local que quedó grogui por el pelotazo.

El Villarrobledo seguía presionando sobre todo en la línea de creación local, donde Samu y Fran Simón se mostraban superiores a Javivi y Fernando. El dominio roblense era claro aunque atrás el Daimiel se mostraba seguro y contundente. Pero en cualquier momento el Villarrobledo podía conseguir el tanto, por la calidad y movilidad de sus hombres de arriba. Biendi y Dani Hoyos se trazaban paredes con facilidad en busca de los huecos pero con falta de punch final.

Un cambio de orientación de Fran Simón de derecha a izquierda habilitó a Ricardo que llegaba con todo por la izquierda. Tenía todo el carril para él, e iba centrado a por Astillero, pero quizá se precipitó en el disparo que se le fue alto. Sólo un minuto después es Biendi el que de nuevo habilita a Fran Simón en la frontal y en una posición buenísima dispara pero es Astillero el que detiene la buena ocasión.

Al Daimiel le costaba muchísimo salir de la presión a la que le estaba sometiendo el Villarrobledo. El partido se estaba jugando a un ritmo verdaderamente frenético. El Villarrobledo iba a por todas pero poco a poco los blancos fueron igualando la contienda. De hecho, antes de la media hora de juego, los blancos pisaban por fin área visitante con peligro. Fue en una falta lateral donde tras varios rechaces el balón le cae a Jony a la altura de punto de penalti. El americano logró conectar un chut potente, pero el esférico salía una cuarta por encima del larguero.

Pero el Villarrobledo seguía a lo suyo, con la intención clara de llevarse los tres puntos del Nuestra Señora del Carmem y Biendi a punto está de sorprender con un disparo lejano que detiene Astillero. El toma y daca y la lucha por cada balón era como si la vida se fuera en ello, pero siempre por cauces deportivos. Era un partido, si no con muchas esquisiteces técnicas, sí con alternativas y emoción por la velocidad e intensidad de cada acción. Sergio la tuvo para el Daimiel en una acción individual con un disparo escorado que Cristian enviaba a córner. Con empate a cero, sensaciones de que el Villarrobledo podía haber conseguido algún gol y de que el partido para el Daimiel iba a ser extremadamente complicado ante un equipo de mucha calidad, se llegaba al descanso.

Comienzo espectacular
El comienzo de la segunda parte fue espectacular. De nuevo el Villarrobledo salió lanzado con todo, pero esta vez el Daimiel respondió con otro aire y dispuesto a no dejarse sorprender. Ricardo tuvo una gran oportunidad en el 48 al plantarse desde la banda izquierda ante Astillero, pero en el uno contra uno el meta volvió a estar más acertado. Pero la respuesta no se iba a hacer esperar. Casi a la siguiente jugada, un gran balón de Jesús a Sergio propicia que este se interne y lance un enorme disparo que Cristian, pese a tocar, no puede detener. La pelota va camino de la portería pero entonces es Chupi el que saca bajo palos.

Las hostilidades se habían roto por completo. El partido entró en una fase de ida y vuelta en la que cualquier cosa podía pasar. Los dos equipos buscaban las bandas y la velocidad. Cualquier desborde, con dos equipos desatados, podía ser mortal. Llegaban los primeros cambios desde la banda, pero la situación era la misma, una lucha sin cuartel total con dos equipos en busca del gol. Biendi, desde la izquierda , lo volvió a intentar con un disparo cruzado en el 67 y a partir de ahí fue el Daimiel el que empezó a generar ocasiones y dominar a su rival al que las fuerzas ya le empezaban a fallar. Era imposible mantener ese ritmo de presión todo el partido.

Empieza la exhibición Cristian y dos balones al poste
Entonces aparecieron las mejores versiones de Wuy, Jesús y Sergio, muy bien acompañados por Fernando y Párraga más un Javivi que se vació en la recuperación. Córneres y jugadas en ataque se sucedieron ahora favorables al Daimiel. La primera en un remate a bocajarro de Jony a la salida de un córner al que respondió Cristian con una parada tremenda. El rechace lo remataba de tacón Jesús, y ahí es de nuevo Chupi el que evita el tanto.

Cinco minutos después, en el 77, es Wuy el que saca una falta desde 30 metros y estrella el balón en el poste izquierdo de la portería de Cristian. El Daimiel lo hacía fácil porque el Villarrobledo dejaba huecos porque no se conformaba con el empate. Pero su fluidez en ataque ya no era la misma y en defensa las ayudas ya no llegaban. Después del poste de Wuy es Jona el que sca un centro chut que se envenena de tal manera que Cristian tiene que sacar una mano salvadora para enviarla a córner, rectificando su posición.

En los últimos minutos, debutaba Vílchez en esta nueva etapa en el Villarrobledo. Fue muy aplaudido el catlán, exjugador del Daimiel, cuando saltó al terreno de juego. Peor en esos momentos, los rojillos lo fiaban todo a alguna contra cuando el Daimiel estaba volcado. De hecho las tuvieron, pero su culminación fue bastante mala con disparos muy altos de sus jugadores. Pero el Daimiel tuvo dos muy claras. En el 82 es Jony el que remata de cabeza adelantándose a todo el mundo y dejando a Cristian clavado, pero de nuevo el balón lame el larguero. Y la gran ocasión, a cuatro minutos del final, en una gran jugada de la delantera daimieleña en la que intervinieron muchos jugadores, empezando por Jona que realizó una tremenda jugada por banda. Pero el que tira un chut potentísimo es Sergio, con la pierna buena. Se cantaba gol, pero Cristian tocó lo suficiente para que la pelota pegara en el larguero y el rechace la defensa lo mandara a córner. Era la segunda madera para el Daimiel. A la salida del mismo, se pidió de forma muy insistente penalti por mano de un defensor, que desde nuestra posición no vimos.

Hasta el final no hubo tregua en ninguno de los dos equipos, llegandose de milagro a un empate a cero final que no refleja las ocasiones que ambos equipos tuvieron para poder adelantarse en el marcador. El empate deja a los dos equipos prácticamente en la misma situación, aunque en el Daimiel la parroquia local, que animó mucho a su equipo, se fue satisfecha por el pundonor y la buena segunda parte realizada ante un equipo con jugadores que han militado en superiores categorías. De hecho, en el Villarrobledo, no jugó ningún futbolista de la localidad.

FICHA TÉCNICA
0 DAIMIEL: Astillero, Rubio, Negrete, José Carlos, Jony, Javivi, Fernando (Jona, min. 74), Jesús (Ramón, min. 84), Sergio, Francis (Párraga, min. 62) y Wuy.

0 VILLARROBLEDO: Cristian, Felipe, Dela, Chupi, Manzano, Fran simón, Joaquín (Montero, min. 65), Samu (Vílchez, min. 80), Dani Hoyos, Biendi y Ricardo (Perico, min. 55).

ÁRBITRO: García Onrubia, asistido en las bandas por Arias Jiménez y Rodríguez Ruiz. Enseñó amarillas por el Daimiel a Rubio, Fernando y Francis. Por el Villarrobledo la vieron Biendi, Chupi, Montero, Perico y Fran Simón.

INCIDENCIAS: Campo de Fútbol Nuestra Señora del Carmen. Unos 400 espectadores en una tarde calurosa. Césped artificial en mal estado.

LA FOTO DE LA AFICIÓN


No hay comentarios:

Publicar un comentario