Jony, un americano en el Daimiel, se sacaba la espina que quince días antes le había amargado la tarde. Por fin, el americano del Daimiel, tras un gol en propia puerta en Quintanar del Rey (que hacía el 2-1 para los locales) o tras ese penalti por mano hace quince días ante el Villarrubia, que suponía el 1-2 para los blanquiazules, por fin, digo, el americano del Daimiel, (realmente del Daimiel B) Jony, podía decir a los cuatro vientos ¡I love this game!
Era el primer gol del americano con el Daimiel en Tercera división. Y vaya gol. Hasta la autoría fue rara, porque los compañeros no sabían si felicitar a Adri, que sacaba el córner o a Jony, porque en principio pareció que podía haber sido olímpico o, como dijo el propio entrenador Kiko Vilches, de un jugador del Mora que "cometía penalti por mano". Pero sea como fuere, y lo que está claro es que el de Estados Unidos impulsa el balón en última instancia. El gol de Jony es tremendamente importante para las aspiraciones de permanencia del Daimiel que, aunque complicadas, continúan intactas.
Fue un triunfo absolutamente merecido pero sobre todo, corto, muy corto, para las ocasiones, clarísimas, de las que dispuso el Daimiel. Y una victoria muy meritoria ante un equipo de calidad técnica y conseguida con muchísimas bajas, hasta siete para este partido. Buyo, sin duda, mantuvo a su equipo en el partido sacando tres balones tremendos a disparos de Sergio, por dos veces, y el propio Jony. Amén de un balón al poste, también de Sergio, que anda negado de cara al gol, y de Javi Sánchez, que sacó bajo palos una pelota que se metía impulsada por Cala. Esas fueron las claras de verdad, ante un Mora que, en ataque, prácticamente pasó desapercibido y no fue capaz de rematar ni una sola vez entre los tres palos en todo el partido ni inquietar verdaderamente a Astillero que volvía a la portería del Daimiel.
Toque sin profundidad en el Mora
Mientras que el Mora se mostraba más técnico en el manejo del balón, pero sin profundidad, el Daimiel imprimió velocidad y verticalidad en sus acciones. El manejo del balón en los morachos era insulso, con una buena colocación defensiva en el Daimiel, y las ocasiones se sucedían en el área de Buyo. Con la sensación de que los locales merecieron bastante más, se llegaba al descanso con empate a cero.
En la segunda parte el Mora trató de llegar más a los dominios de Astillero. Un par de faltas laterales y tres córneres seguidos para los visitantes, llevaron cierta intranquilidad a una grada que presentó una pobre entrada para lo que se jugaba el equipo. El partido pasó por una fase en la que el ritmo bajó de forma importante y el Daimiel daba la sensación de impotencia y falta de ritmo.
Entonces aparecieron las jugadas a balón parado. Buyo sacó dos manos terribles a Jony y Sergio en la misma jugada y poco después el americano lograba su primer gol en Tercera. A partir de ahí el Mora apretó los dientes, y pese a que lo corto del resultado ponía nervioso al respetable, lo cierto es que el Mora no hizo verdadero mérito para marcar algún gol en el Nuestra Señora del Carmen.
Al final, un triunfo muy importante, vital, que mantiene al Daimiel fuera de los puestos de descenso directo, aunque situado en posición de primer arrastre, aunque, eso sí, ahora mucho más cerca de las posiciones de fuera de todo peligro. Hay que seguir remando porque la travesía de cuatro partidos que quedan va a ser durísima.
FICHA TÉCNICA
1 DAIMIEL: Astillero, Domin, Negrete, Jony, Ricardo, Fernando, Jona (Cala, min. 63), Wuy (Jesús, min. 72), Sergio (Dani Pareja, min. 84), Francis y Adri.
0 MORA: Buyo, Otero, Dani, Alberto, Javi Sánchez, Héctor, Pablo, Zurro (Josué, min. 56), Chanete, Sierra y Juanfran (Borja, min. 72).
ÁRBITRO: Espinosa García, asistido en las bandas por San José González y Andrés San Juan. Enseñó tarjetas amarillas por el Daimiel a Sergio, Jona, Jesús y Astillero. Por el Mora la vieron Zurro y Héctor.
GOL:
1-0, minuto 74. Jony.
INCIDENCIAS: Campo de Fútbol Nuestra Señora del Carmen. Unos 200 espectadores en tarde muy agradable. Césped artificial en malas condiciones.
LA FOTO DE LA AFICIÓN
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