El CF La Solana goleó a domicilio al Madrigueras gracias a su efectividad cara a puerta, pero también a la candidez de los locales en ataque, que tuvieron muchas y claras ocasiones para haber amargado la tarde a los amarillos, ayer de azul. El resultado es engañoso si contamos las oportunidades de gol de uno y otro, pero el fútbol casi siempre premia al más certero, y este fue La Solana, que logró tres puntos clave en su pugna por consolidarse en la zona noble.
Juan de Lara situó de inicio a Míchel como lateral derecho ante la ausencia de Juande y los problemas físicos de Javi Núñez. Esto provocó que jugase con José Pedro y Jesús Bueno en el medio centro, dos futbolistas de mucho toque pero menos músculo. La puesta en escena fue correcta, con claro dominio del balón, aunque sin profundidad. Pero los problemas llegaron pronto, cuando el Madrigueras se desperezó y comenzó a ver espacios en la zona ancha. El desajuste duraría el resto del partido, incluso cuando Míchel regresó a su lugar de pivote. Por alguna razón, La Solana no supo sellar ese agujero y los locales se limitaron a enviar balones a la espalda de la defensa, donde Inti sufrió de lo lindo por el costado zurdo. Menos mal que los delanteros locales fueron un cero a la izquierda en la definición. Gozaron hasta de cuatro mano a mano con Toni Huertas, que no detuvo ni uno. Todos iban fuera.
He ahí la gran diferencia. La Solana sí acertó cuando las tuvo. La primera (y única) de la primera parte la clavó Pitu por bajo, superando al meta local en su salida. En la reanudación, Almarcha fue el auténtico revulsivo. Firmó el 0-2 tras una espléndida jugada entre Mini y José Pedro, y también el 0-3 gracias a una buena acción de Colchón.
Esto es la liga y lo importante es ganar. La Solana lo hizo sin jugar bien, y eso también es significativo. Es imposible terminar mejor estas dos salidas consecutivas, con 6 puntos en el zurrón y sensaciones ambivalentes en cuanto al fútbol desplegado. Imperial partido en Tomelloso y regular en Madrigueras. Pero lo importante es que La Solana ha demostrado ser capaz de hacer muy bien las cosas y ganar, y de seguir ganando sin hacerlas. Los grandes equipos también se construyen así.
El próximo domingo llega La Gineta, líder del grupo. La Moheda debe ser una olla a presión en favor de los amarillos, y su afición seguro que no fallará.
lasolana.es
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