Juanda desarma al Tomelloso (2-0)

Un golazo de Juanda, desde 40 metros y con su pierna mala, la derecha, en el primer minuto de juego abrió la espita del triunfo daimieleño que fue merecido e incluso algo corto. El Tomelloso, que en su haber tuvo que nunca le perdió la cara al partido y trató de jugar siempre desde atrás, apenas inquietó la portería de Astillero. Lo peor del partido fueron las lesiones de Rubio y Bernal. Este se fue llorando porque reaparecía hoy tras un mes en el dique seco. Las lesiones, y la labor del colegiado, Fernández Ruiz, que fue con mucha diferencia lo peor del partido. Sin personalidad y sin criterio alguno le vino grandísimo el partido.

El gol de Juanda, nada más comenzar el partido, abrió de par en par la puerta del triunfo para el Daimiel CF. Con un gol a favor, es complicado que al Daimiel se le marchen los encuentros, debido a que es  un equipo al quees difícil marcarle goles. Frente al Tomelloso quizá no realizó un buen juego, sino que fue mucho más práctico que en ocasiones precedentes. La defensa blanca se empleó con contunencia, aunque el choque se dirimió casi todo él, en una estrecha franja del centro del campo donde la guerra de guerrillas fue una constante.

El golazo de Juanda dio origen a un partido con mucho ritmo y apenas descanso. La brega fue constante y los equipos no daban tregua. El Daimiel machacó por banda izquierda, donde Pires se vio impotente y desbordado una y otra vez. En el Tomelloso sólo las subias por banda de Caldas daban sensación de peligro. Suyo fue el único disparo a puerta con cierto peligro del equipo amarillo en la primera parte.

Pero entre Moraga y Juanda desarbolaron por la izquierda a un Tomelloso que no podía frenar a los locales. El lateral le puso un balón de oro al extremo y este con gran picardía pico el balón ante la salida de Álvaro, pero el meta le adivina la intención deteniendo in extremis lo que podía haber sido el segundo. Pero el segundo no se hizo esperar. Una gran jugada de ataque local con pared de Moraga y Juanda, este centra al punto de penalti donde Diego Buitrago no llega al remate de cabeza, pero aparece Paco en el segundo palo, que le da tiempo a controlar y fusilar sin miramiento al portero tomellosero. El partido, en el minuto 23, parecía totalmente controlado con 2-0.

Fernández Ruiz, protagonista
La intensidad en el juego no decayó con el 2-0 y los equipos buscaron la portería rival, aunque ya con excaso acierto hasta el descanso. A balón parado llegaron algunos sustos en ambas metas pero el marcador no se movería. Lo peor para el Daimiel, la lesión de Rubio, completamente solo, que se torció el tobillo. Bernal era el único hombre defensivo de los siete daimieleños del banquillo. Salió y reaparecía de esa forma tras un mes lesionado.

Lo que tampoco gustó fue la actitud que fue adquiriendo el colegiado Fernández Ruiz. O no veía nada, o no se enteraba de nada. Sacó de sus casillas a los jugadores de ambos equipos, y en la segunda parte estuvo a punto de írsele el partido de las manos cuando el ambiente se caldeó. Hubo jugadas polémicas en las áreas, haciéndose el sueco en todo momento sin querer saber nada.

Entretenida segunda parte
En la segunda parte el Tomelloso tuvo su mejor ocasión de todo el encuentro. Como en todos los balones parados Sancho botaba un córner (por cierto el Tomelloso botó siete por sólo uno el Daimiel en todo el partido), y Monreal, el más alto de la clase, remata de cabeza lo que parecía el 2-1, pero la pelota le salió demasiado picada, botó en el césped y salió por encima del larguero. Ahí tuvo fortuna el Daimiel CF.

La guerra en el centro del campo era tremenda y los encganchones empezaron a salir. Diego Buitrago las tuvo tiesas con los dos centrales, casi siempre con la partida perdida según el colegiado. Unas faltas que en la vida pitarían en contra de la defensa dentro del área. Fernández Ruiz no supo imponer su ley y por momentos el partido se le escapaba. El Tomelloso lo siguió intentando a balón parado, dado que Rafa Cortés no conseguía conectar con sus compañeros.

Bernal se va llorando
La mala suerte se cebó con Bernal. En el minuto 60, llevaba 44 en el campo, sufre una lesión que le impide continuar en el campo. Con lágrimas en los ojos se retira al banquillo y le tiene que sustituir un delantero, Eduardo, porque no hay defensas en el banquillo. La reorganiación en el tapete supone que Ángel abandone el lateral para situarse de central y Paco retroceda en su posición para jugar de lateral. Una defensa de urgencia que verdaderamente sufrió poco hasta el final del partido.

En el 69 primera jugada verdaderamente polémica. Una mano clarísima de Caldas dentro del área que no la ve ni él ni su asistente que estaba perfectamente colocado. Era el minuto 69. Pero el error más clamoroso de Fernández Ruiz, que evidención un más que absoluto desconocimiento del reglamento, o, en su defecto, una falta de conccentración total, se producía en el minuto 71. Diego Buitrago se hace con un balón y se interna como una exhalación entre Borja y Sancho y cae derribado en el área. En principio parece un penalti claro y expulsión de Borja, que es el que entra. Pues bien, Fernández Ruiz señala la falta y a instancias de su asistente la saca diez centímetros fuera del área, ante las protestas desairadas de jugadores y afición local. Pero lo más grande es que Borja no fue ni amonestado con amarilla, cuando el reglamento no puede ser más claro al respecto. Muy mal la labor de un colegiado que perdió por completo los papeles.

Balón de Vicente al poste
La mejor jugada colectiva del Daimiel en todo el partido terminó con un disparo cruzado a media altura de Vicente, que obligó a una estirada de Álvaro, que logra tocar a una mano y desviar el balón que pega en el poste y sale. Los blancos merecían ya cerrar el partido por ocasiones. Los últimos instantes fueron emocionantes porque el Tomelloso no se rendía y el Daimiel a la contra podía rematar al rival. Los tomelloseros se mostraron indolentes, mientras que el Daimiel, en las botas de Juanda tuvo dos ocasiones de nuevo para rematar la faena, sobre todo la última que con tres compañeros esperando un centro mortal de necesidad, prefirió un disparo que salió desviado.

Lo que ya no nos gustó tanto es el abuso de sacar en largo (larguísimo mejor dicho) de Astillero buscando el error defensivo (que la verdad ocurrió un par de veces) o que la cazara el delantero. Es una forma de regalar el balón demasiado fácil cuando loque interesaba era mover la pelota y que el tiempo pasara. Ocurrió en Miguelturra y volvió a ocurrir contra el Tomelloso.

En definitiva tres puntos más para el Daimiel, que está vez sí fue práctico y efectivo, que le hacen romper la racha de cuatro empates consecutivos, le mantienen invicto en la categoría, junto a La Gineta (próximo rival que tiene que venir al Estadio) y además se sitúa como equipo menos goleado con únicamente cuatro goles en contra.

FICHA TÉCNICA
2 DAIMIEL: Astillero, Fernando, Moraga, Paco, Rubio (Bernal, min. 16)(Eduardo, min. 60), Francis (Jesús, min. 67), Juanda, Ismael, Martínez (Vicente, min. 57), Ángel y Diego Buitrago (Andrés, min. 78).

0 TOMELLOSO: Álvaro, Pires, Caldas, Borja, Lucho (Bollos, min. 77), Marcos, José López (Nico, min. 69), rafa Cortes, Roberto (Luis, min. 57), Sancho y Monreal.

ÁRBITRO: Fernández Ruiz, asistido en las bandas por Aguado Gutiérrez y Pinto Marín. Rematadamente mal. Sin criterio ni personalidad. Sacó tarjetas amarillas por el Daimiel a Ismael, Paco y Astillero. Por parte del Tomelloso la vieron Sancho, José López, Rafa Cortés y Lucho.

GOLES:
1-0, minuto 1. Juanda.
2-0, minuto 23. Paco.

INCIDENCIAS: Tarde que se fue estropeando conforme pasaban los minutos, con fuerte viente de costado. Hasta el momento la mejor entrada de la temporada, con unos 350 espectadores. Césped en aparente buen estado.

 

LA FOTO DE LA AFICIÓN