Doble ración de fútbol esta tarde en el Nuestra Señora del Carmen. A las cinco juega el Daimiel "B" dentro de la segunda jornada de Liga en Segunda Autonómica. El rival es el Brazatortas que llega con Tanque, viejo conocido del Daimiel Racing Club. Despés, a las 20:00 el Daimiel Juvenil juega el último partido de pretemporada ante el Gimnástico de Alcázar B, en lo que será la presentación oficial de los juveniles.
Encuanto al segunda Autonómica, los de Paco Pinilla cayeron derrotados por 3-2 en el primer partido de Liga disputado en Villamayor. Realizaron buen partido los daimileños pero no pudieron con la experiencia local. El Brazatortas ganó su primer encuentro ante el Fuencaliente, 4-2, por lo que vendrán con la moral alta. El Daimiel "B" querrá ganar el primer partido en casa para segui creciendo como equipo.
OPINIÓN
Lo que van a leer es una reflexión en voz alta absolutamente personal.
Esta semana el entrenador del Daimiel "B", Francisco Pinilla, realizaba unas declaraciones en las que se quejaba que le habían "quitado" a un jugador de su equipo, Paco, "para jugar tres minutos". En las mismas declaraciones, realizadas en Radio Daimiel, decía que él estaba "para trabajar para el primer equipo". ¡Que enorme contradicción!
Para empezar, si existe el Daimiel "B" es porque los directivos del Daimiel "A" así lo han querido, y se supone que los gastos inherentes a ese equipo, que no sólo se traduce en lo que cobra un jugador, que no cobra nadie, pero gastos hay, los tiene que asumir la directiva. Sin Daimiel "A", no hay Daimiel "B". Que quede clarísimo.
El equipo "B" se hace para nutrir de futbolistas al primer equipo, y para que los jugadores continúen en su etapa de formación, antes de dar el paso a categorías más importantes o al primer equipo.
Por tanto, toda la estructura de club debería estar supeditada a la punta de la pirámide, el primer equipo.
Si a Paco Pinilla le "quitan" un jugador, no debería "joderle" sino todo lo contrario, debería estar muy satisfecho de ver reconocido su trabajo y el de los jugadores llamados.
El jugador que va al primer equipo no debería ir como un castigo y "quedarse sin jugar" en su equipo, sino que debería verlo como un premio, disfrutar de estar con los compañeros del primer equipo y aprender que un equipo se compone de los titulares y los suplentes, aunque sólo sea para jugar un minuto. Estamos malacostumbrando a los futbolistas a que sean jugadores de fútbol. Son dos conceptos muy distintos.
Personalmente, lo digo alto y claro, me sobra el jugador que no quiera ir convocado con la primera plantilla cuando el entrenador del primer equipo lo requiera, aunque sólo sea para rellenar banquillo. La imagen también es importante en un club.
Y por supuesto si la tendencia es que los jugadores del segundo equipo no quieran ir al primero, me sobra el equipo filial, porque su razón de ser queda totalmente fuera de lugar. Más claro, agua.
No entraré en otras consideraciones como las de si un jugador tiene o no tiene calidad para estar en Preferente y no en el Segunda Autonómica. Es posible que sea así, pero también es verdad que hay otros 35 equipos en Preferente de Castilla-La Mancha donde han podido recalar esos jugadores que estiman que deberían estar en Preferente.
PD: De momento han jugado en el primer equipo cuatro jugadores con ficha del B, Carlos (cinco partidos de titular), Moisés, Valero y Paco.
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