En caída libre (0-2)

Decepcionante, muy decepcionante el Daimiel. Si el partido de esta tarde debía servir para que los jugadores se reivindicaran y demostraran que pueden llevar a buen puerto el barco, han perdido la oportunidad. El Daimiel es un buque a la deriva. Con el capitán (entrenador) en la grada por tener que cumplir sanción disciplinaria, los remeros pusieron de su parte todo lo que tienen, según el segundo de abordo, el preparador físico José Carlos Díaz del Campo. Y si eso es así, es que el Daimiel tiene muy poquito que ofrecer.

Vale que el Piedrabuena tiró dos veces a puerta, dígamos tres, para ser honestos, y consiguió dos goles. Pero ¿y el Daimiel? Lo hizo en dos ocasiones, ambas por parte de Ramón. En el minuto 1, en una enorme ocasión, y en el 44, mejor todavía, desde el punto de penalti. Y ni así, porque lo paró con la pantorrilla el meta Lirio. Iban 0-0, y en la siguiente jugada, el Piedrabuena, de la nada, consigue un tanto, obra de Abdón, que consigue lo que seis o siete jugadores no pueden hacer en esa misma jugada, darle al balón. Era el minuto 45.

Como en la mili, el valor se presupone, y claro, entendamos que los jugadores del Daimiel lo
dieron todo. Pero oiga, cuando uno juega en casa, podrá jugar bien o mal, pero por lo menos se le debe pedir que haya habido ocasiones y que trate de presionar al rival y acogotarle cuando el nivel deportivo es, como poco, igual.

Si la primera parte fue mala, la segunda fue peor. Un horror de partido. El Piedrabuena se defendió sin ningún problema, y el Daimiel fue incapaz de crear ni una sola ocasión de peligro. Nada de nada, cero total. En estas, Peli, que no sé si llevaría siquiera un minuto en el campo, agarró un balón en el cículo central y disparó a puerta. Sorprendió a todo el mundo, menos al asistente, que vio claramente como la pelota tras pegar en el larguero botó dos veces dentro de la portería y, con suspense, concedía el tanto, pese a las protestas, injustificadas, de los locales.

Era el minuto 82 y la sentencia a un partido plano, pésimo y para olvidar de los dos equipos. Aunque claro, para el rival, con tres puntos en la buchaca y fuera del descenso, el triunfo supo a gloria.

En descenso y reunión de urgencia
Tras la derrota el Daimiel cae a los puestos de descenso. Hubo una larga reunión en los vestuarios de parte de la directiva con los jugadores y sin el cuerpo técnico. Evidentemente no ha trascendido lo que allí se habló, que se supone no será nada bueno aunque, a lo mejor, sí esclarecedor.

Lo cierto es que el Daimiel dejó unas sensaciones muy pobres, con un equipo con carencias variadas y que, desde luego, no puede aspirar al ascenso de categoría. Más que un objetivo, el ascenso es una ilusión. Cuanto antes se tome conciencia de esta realidad, mejor para todos. Trabajo, constancia e ir partido a partido para salir cuanto antes de una dinámica que se ha tornado tremendamente negativa para el Daimiel RCF.

Sin duda, lo peor, la indiferencia con que el público despidió al equipo. Quizá resignación a lo visto. Y esa dinámica, que a la afición le dé igual ocho que ochenta, puede ser muy peligrosa porque si ya de por sí las gradas están bastante vacías, se pueden vaciar mucho más.

FICHA TÉCNICA
0 DAIMIEL: Astillero, Aarón (Adri, min. 71), Negrete, Fernando (José Carlos, min. 54), Javivi, Cala, Jesús, Ramón (Álvaro, min. 87), Jony, Carlos (Jona, min. 59) e Ismael.

2 PIEDRABUENA: Lirio, Juli (Pollo, min. 45), Jesús, Enrique, Carlos (Gonzalo, min. 45), Cano, Álvaro, Roberto (Bola, min. 86), Marco (Álex, min. 73), Abdón y Párraga (Peli, min. 81).

ÁRBITRO: Ordóñez Benito, asistido por Ponce Lozano y Moreno Osuna. Muy bien. Enseñó tarjetas amarillas por el Daimiel a Ismael, Ramón y Jesús. Por el Piedrabuena la vieron Carlos, Juli, Pollo y Roberto.

GOLES:
0-1, Minuto 45. Abdón.
0-2, minuto 82. Peli.

INCIDENCIAS: Estadio Municipal de Daimiel. Unos 200 espectadores en la grada. Tarde agradable y césped un pelín alto. Buen despliegue de recogepelotas, nueve chavales, que hicieron de forma excelente yrápida su labor. Así, sí. Como viene siendo norma en Daimiel, se le realizó informe al colegiado de la contienda.

LA FOTO DE LA AFICIÓN