Lo que pasó en el Villarrobledo-Marchamalo, ya sucedió en el Madrigueras-La Gineta

Lo sucedido en Villarrobledo tuvo su antecedente el 14 de octubre en el partido del grupo I de preferente que disputaron Madrigueras y La Gineta y que acabó con victoria visitante por 3-6. Recordemos, primero, lo que pasó el domingo en Villarrobledo. Con 0-1 en el marcador, el árbitro Álvarez Pinardo (que acaba de descender de Segunda B) señalaba un penalti a favor del Villarrobledo. Lo fue a tirar el exdaimieleño Vílchez. El centrocampista marcó gol, pero el colegido estimó que utilizó la paradiña (típico en Vílchez) que está prohibida por la International Board. La decisión de Álvarez Pinardo fue anular el gol, amonestar a Vílchez y, lo más sorprendente, dar el balón al Marchamalo para que sacara de puerta en vez de volver a repetir la máxima ena. Pese a la que se lió, Álvarez Pinardo se mantuvo en sus trece. Luego, el propio Álvarez Pinardo reconoció su tremendo error el lunes en Radio Castilla-La Mancha, algo que también se sale fuera de lo normal. Esta curiosa jugada ocurrió exactamente igual en el partido de Preferente Grupo I entre el Madrigueras y La Gineta, que acabó con 3-6 a favor de La Gineta. En un momento del partido el colegiado Diego Calvo San Higinio anuló el tanto conseguido por un futbolista del Madrigueras de penalti con paradiña y señaló falta en contra del lanzador, lo que provocó un fuerte altercado al final del encuentro. El Madrigueras reclamó y el Comité de Competición no contempló algunos detalles del acta, además de reconocer el error del trencilla. Respecto a Diego Calvo San Higinio todo indica que le han sancionado desde el comité territorial dejándole sin arbitrar unas cuantas jornadas. De hecho no ha vuelto a dirigir más partidos desde aquella fecha. Da que pensar, tras estas dos decisiones idénticas en dos partidos tan diferentes, que, o ha habido algún tipo de charla o circular que ha aleccionado a los árbitros en este sentido, o que ha habido algún tipo de confusión en alguna reunión técnica o circular. Porque, convengan conmigo, en que no es normal que se repita este tremendo error en dos partidos en Castilla-La Mancha. Se supone que después del revuelo generado, sobre todo en el Villarrobledo-Marchamalo, de Tercera división, este error tan manifiesto no se vuelva a repetir.