Monasor Blesa machaca al Daimiel y ofrece el triunfo en bandeja a La Solana

El Daimiel CF perdió dos puntos en La Solana la pasada temporada en el descuento. Una falta al borde del área, inexistente, pitada por Bernabé Martínez fue convertida, magistralmente, eso sí, por Juande. En aquel partido al final se escuchó aquello de "son cosas del fútbol".

Lo de ayer en La Moheda ha tenido un desenlace peor, con un arbitraje pésimo (ya van tres consecutivos) que machacó indiscriminadamente a los visitantes, con faltas y más faltas, y amonestaciones, mientras que fue condescendiente e indolente con los locales. Cinco tarjetas llevaba el Daimiel en el minuto 88 por ninguna los locales. Lo peor, la jugada del penalti en el minuto 79, a escasos 11 minutos para el final del partido. Nos pilló en una posición óptima para afirmar con rotundidad que no fue penalti en ningún caso. No hubo contacto en ningún momento entre Domin y Mini. El piscinazo del extremo local, lo aprovechó Monasor Blesa, un árbitro con un "parecido razonable" a Zed o (luego Cadete Zed), el histriónico jefe de "la banda de los malos" en Loca Academia de Policía 2 (búsquenlo en Google si no son friquis de la saga de estas películas), para pitar un penalti que dejó entre asombrados e indignados a la numerosa parroquia daimieleña desplazada a La Moheda. Nos tuvimos quevolver otra vez con la cantinela "son cosas del fútbol".

Las protestas de los visitantes, que ya venían "quemados" por la arbitrariedad (que no ecuanimidad) de las decisiones del trencilla, no se hicieron esperar. Impotencia que se vio acrecentada cuando Huertas, el portero de La Solana, lograba perforar la meta de Astillero. Por cierto, una decisión muy arriesgada del conjunto amarillo, porque de haber habido rechace, cualquier cosa hubiera podido pasar. Pero eso quedará a beneficio de las conjeturas. Un arbitraje al que, desde luego, se apuntaría más de uno si se trata del equipo de casa.

También es verdad que el conjunto de Santi tuvo ocasiones más que suficientes para liquidar a su rival a lo largo del partido. De hecho, el penalti, fue el único disparo de La Solana con verdadera intención de gol en todo el encuentro.

Muchos años sin perder, y se pierde siendo mejores
Al Daimiel se le respetaba en La Solana. Sobre todo por las innumerables ocasiones en las que los blancos sacaron tajada de allí y que se vieron truncadas de forma lamentable, en esta temporada, por una decisión arbitral errónea a todas luces. Por eso y por la plantilla que tiene el Daimiel, supuestamente, cargada de gente, veterana y con expeiencia en Tercera división.

Pues bien, el Daimiel se plantó en La Moheda con ocho jugadores daimieleños de pura cepa, tres de los cuales, la temporada pasada eran juveniles: Domin, Martínez y Diego Buitrago. Si por experiencia en Tercera división entendemos haber jugado más de una temporada en esa categoría, tenemos que sólo dos jugadores tienen esa experiencia. Los dos de fuera de Daimiel (los que pretendidamente deben dar ese plus de calidad). Eran Francis, que por motivos personales vive en Daimiel desde hace dos años, y Juanda, membrillense criado y formado en los juveniles del Daimiel, más tres temporadas en el primer equipo antes de irse al Albacete. La media de edad del once titular del Daimiel ayer en La Moheda era de 22 años.

Eso más una defensa de circunstancias. Con tres centrales en el dique seco, José Carlos, que no ha jugado ni un sólo minuto en toda la Liga, Rubio y Bernal, que no es central, pero es la emergencia en estos casos. La gran duda, con Ángel presumiblemente en ese puesto, era el lateral derecho. Las papeletas eran para Jaime Núñez, que podría reaparecer después de cuatro jorndas sin jugar por lesión. Pero no, la sorpresa del once fue Domin (junto la de Eduardo en vez de Paco), que se colocaba de titular, después de seis jornadas sin jugar, sin haber sido siquiera convocado en el anterior partido ante el Tomelloso, y con sólo 9 minutos en su haber en toda la Liga correspondientes a la primera jornada ante el Puertollano B.

Una apuesta arriesgada y de hecho el muchacho salió nervioso, lógico, y por su banda, la izquierda del ataque solanero, encontró sus primeras vías de entrada el conjunto amarillo, pero bien en las ayudas Fernando, Domin fue entrando y acoplándose al partido para acabar siendo superior a su par, Mini. Luego sería un involuntario protagonista en un penalti inexistente que Monasor Blesa se sacó de la manga. En la derecha debería haber estado Capelo, pero, probablemente lesionado de última hora, dejó su puesto a David Sevilla, lo que facilitó las cosas a Moraga y Juanda, para ser otra vez muy peligrosos por su banda izquierda.

Moraga, al larguero
La Solana salió como la gaseosa, impetuosa, peleando cada balón e imprimiendo ritmo. Aunque un par de sustos de los visitantes, hicieron recular a los de Juan de Lara y darse cuena que dejar espacios al Daimiel podía ser mortal de necesidad. Como decía, las ocasiones llegaron en la portería local. La primera clara fue una internada de Diego Buitrago por la derecha que se va pleno de fuerza y velocidad y su centro lo deja pasar Juanda para que Eduardo engatillara. Pero este no calculó bien y no le dio al balón. En esta acción se vio que Diego Buitrago necesit espacios y carrea. Quizá juega demasiado encorsetado de "nueve". Pero sin él, ¿quién es el "nueve"? Esa es una de las claves del actual Daimiel. Poco después, el propio Eduardo lanzaba un centro chut que se marchaba fuera.

Pero la gran ocasión de la primera parte llegaba en el minuto 23. Falta a unos seis metros de la frontal donde Moraga suele ser letal. Le pegó el lateral con muca fuerza y el esférico se estrellaba en todo el larguero. El rechace le cayó a un sorprendido Diego Buitrago, que quizá no se esperaba ese regalo, pero el balón llevaba tal potencia que le fue imposible controlarlo. Con mucho ritmo, pero control daimieleño de la situación, salvo algún balón colgado o alguna contra amarilla sin consecuencias, se llegaba al final del primer tiempo.

Mejores minutos visitantes
El descanso sentó fenomenal a los de Santi. Superaron con mucha clarividencia a los amarillos en la reanudacion. Anticipación en el centro del campo, con Jesús y Martínez tremendamente solidarios, y con las bandas tapadas, La Solana no encontraba ni la forma ni la manera. Así que las ocasiones llegaron del lado visitante. La primera clarísima fue en el 52. Fenomenal pase a Eduardo, en banda izquierda, que se queda sólo ante Huertas y cuando se cantaba gol, su disparo sale ligeramente desviado por el palo largo. Solo cuatro minutos después, en el 56, Huertas falla clamorosamente ante la presión de Juanda, este le roba el balón, el portero sale del área detrás de él, y Juanda, con la pierna buena, la izquierda, lanza una rosca desde el pico del área que se marcha fuera ante la desesperación visitante. Es el mismo Juanda que el domingo pasado se la clavó desde casi el centro del campo al Tomelloso. Pero en esta ocasión no hubo fortuna.

Justo antes Fernando había visto su primera amarilla en una acción que repitieron los jugadores solaneros, sin la misma reacción del colegiado. Como en una internada de Moraga por banda izquierda, que se marchaba raudo en paralelo a la línea de fondo, y que fue frenada en seco por Javi Núñez. Era ya bien entrada la segunda parte y resultaba incomprensible como el equipo que tenía la posesión del balón llevaba más cartulinas amarillas que su rival, que permanecía impoluto.

Esas diferencias de criterio, quizá influenciado el colegiado por el excepcional ambiente en las gradas, con, dicen, más de quinientas personas, fueron enervando a los jugadores visitantes, que, después del penalti, y la expulsión, en el descuento, de Fernando, acabaron desquiciados con la labor de Monasor Blesa. Luego llegó el penalti ya comentado que costó la amarilla a un impotente Domin, y más tarde otra amarilla más para Martínez. De hecho al minuto 89 se llegaba con cinco amarillas para el Daimiel por ninguna para La Solana, y las dos que recibieron al final, a beneficio compensatorio y perfectamente evitables.

Fernando, expulsado en el 93
La traca final de Monasor Blesa fue de órdago. En el minuto 89 Paco se interna en el área y cae ante la salida de Huertas. Honestamente no creo que fuera penalti, pero sí córner, que es lo que señala el asistente. Pero Monasor Blesa, peor colocado, señala saque de puerta ante un incrédulo Juanda, que seguía la jugada y que no paró de protestarle la decisión. No era la primera vez que el principal desautorizaba al asistente en jugadas que favorecían al Daimiel.

El remate, la expulsión de Fernando en el minuto 93. Fue por protestarle que un jugador de La Solana le había agarrado y sacado la camiseta. Eso le costó la segunda amarilla y un nuevo central que se cae para recibir al líder La Gineta la próxima jornada. Por cierto, no compendemos la actitud ¿orden? de no indicar en las actas (al menos las electrónicas) los verdaderos minutos de las amonestaciones y de los goles cuando se producen más allá del minuto 90. No es problema de la aplicación informática, sino de que los colegiados, insisto no sé si por alguna orden de arriba, se resisten a indicar que haya pasado algo más allá del minuto 90. Sólo en contadísimas ocasiones lo hacen. (Realicen un seguimiento a las actas de internet, sean de los partidos y categoría que sean, y lo comprobrán).

En fin, primera derrota de la Liga, tremendamente injusta, y propiciada, clarísimamente, por una decisión errónea del colegiado. Las "cosas" del fútbol dictaban que ayer la racha de tantos años sin perder en La Moheda se tenía que acabar. Y así fue.

FICHA TÉCNICA
1 LA SOLANA: Huertas, Javi Núñez (Tore, min. 73), Juande, Diego Sevlla, Juli, Míchel, José Pedro (Almarcha, min. 63), Jesús (Palacios, min. 73), Davd Sevilla (Mati, min. 89), Mini y Pitu.

0 DAIMIEL: Astillero, Fernando, Moraga, Jesús, Eduardo (Vicente, min. 56), Francis, Juanda, Domin (Jaime Núñez, min. 84), Martínez (Andrés, min. 84), Ángel (Sergio, min. 73) y Diego Buitrago (Paco, min. 80).

ÁRBITRO: Monasor Blesa, asistido en las bandas por García López y García Delicado. Muy injusto en sus decisiones perjudicó claramente al Daimiel CF, incluido el penalti pitado a favor de La Solana que no existió. Casero a más no poder. Enseñó amarillas por La Solana a Mini y Almarcha. Por el Daimiel la vieron Juanda, Francis, Domin y Martínez. Expulsó por doble amonestación a fernando, en el minuto 93.

GOL:
1-0, minuto 79. Huertas, de penalti.

INCIDENCIAS: Tarde esplendida de La Solana. Mucha animación en las gradas con unos 500 aficionados. Muchos aficionados de Daimiel que se hiieron notar. Césped en aparente buen estado, aunque irregular.