sábado, 28 de septiembre de 2013
Alexandru Oprica ficha por el San José Obrero y podrá jugar ante el Daimiel
El San José Obrero de Cuenca juega este domingo en Daimiel. Y lo hará con un fichaje de última hora, el que realizó ayer de Alexandru Oprica. Oprica, como es conocido en el mundo del fútbol es un rumano de 28 años afincado en Cuenca desde hace más de una década. Se trata de un auténtico trotamundos del fútbol que se ha "buscado la vida" tratando de tener una oportunidad en el fútbol profesional que no le acabó de llegar.
Desde que llegó a Cuenca se enroló en el San José Obrero para pasar desde ahi, sobre todo en los últimos años, a una verdadera retahíla de equipos a cada cual más exótico.
Azarosa vida deportiva
Este interior izquierda de carácter goleador comienza su faceta más azarosa depués de tres temporadas consecutivas en el San José Obrero en Preferente, en la última de las cuales, 2010/11 en logró anotar ocho goles. Terminada la misma, decidió probar fortuna en otros aires. En la pretemporada 2011/12 probó durante un tiempo en el San Sebastián de los Reyes de Segunda B. De ahí, se fue al Carranque, de Tercera división, en la "operación casting" que este equipo realizó en su última campaña en Tercera. Oprica fue seleccionado y debutó en Tercera división.
No estuvo mucho tiempo en Carranque porque la economía del equipo toledano no daba para mucho más, y se marchó a la Preferente, en concreto al Motilla. Allí conoció al que es su actual entrenador en el San José Obrero, Manolo Martínez, que en ese momento lo era del Motilla. Fue la fase, quizá, dorada de Oprica. En apenas dos meses que duró su estancia motillana logró cinco goles y su equipo se aupó al tercer puesto, siendo el Motilla un recién ascendido.
Su relación con el mundo del fútbol conquense le hizo aventurarse en su faceta más exótica. Fichó en el Saint Eloi Lupopo, conjunto de Primera división de la República Democrática del Congo y representativo de la segunda ciudad del país africano, Lubumbashi. Era su tercer equipo en la misma temporada. Oprica cumplía su sueño de jugar en un equipo profesional de la mano de dos entrenadores que habían entrenado en Cuenca, como eran Zurro y Mateo. Además, tuvo la oportunidad de jugar la Champions League de África.
Retorno fugaz a Cuenca
Tras su periplo africano, la temporada pasada 2012/13 la empezó en la UB Conquense, club con el que tuvo la oportunidad de volver a jugar en Tercera división. Pero antes de Navidad solicitó la baja en el club de la capital conquense, que más tarde ascendería a Segunda B, por motivos personales y por las escasas oportunidades. Fue entonces cuando decidió retornar a su país, Rumanía, y enrolarse en el Olimpia Ramnicu Sarat equipo de la Liga III, categoría como la Segunda B en España (en cuanto al nivel piramidal).
Acabada la temporada en Rumanía, Alexandru Oprica volvió a su ciudad de adopción, Cuenca. Se anunció su fichaje con el Quintanar del Rey, de Tercera división, para esta campaña, pero tras unas semanas entrenando con los quintanareños, unas desavenecias con el pago de los desplazamientos dieron al traste con su fichaje real. Mantuvo contactos con el Pedroñeras, también de Tercera, que no fructificaron y después, ya a finales de agosto, se anunciaba su fichaje con el San José Obrero.
Sin embargo no ha sido hasta ayer cuando el San José Obrero ha podido diligenciar la ficha de Alexandru Oprica, al parecer, por unos problemas con el transfer desde Rumanía (por su paso por el Olimpia Ramnicu Sarat) y alguna otra cuestión. El caso es que dos temporadas y cinco equipos (oficialmente) después, Alexandru Oprica retorna al San José Obrero, club en el que pretenderá reverdecer viejos laureles goleadores desde la banda izquierda del club conquense. En Daimiel, este domingo, podrá jugar, lo que será una buena baza atacante para el San José Obrero que con el rumano tiene a 23 jugadores en plantilla.
La cuestión es si aguantará hasta el final de la temporada.
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