viernes, 27 de febrero de 2015
Las consecuencias que la "huelga" tendrá en el Daimiel RCF
Los clubes de Castilla-La Mancha aprobaron en una asamblea a la que no acudió el Daimiel RCF, realizar una "jornada de huelga" (lo que en realidad es un cierre patronal) para el fin de semana del 7 y 8 de marzo.
La Junta Directiva de la Federación Española de Fútbol, reunida el pasado martes, decidió seguir adelante con esos planteamientos dando luz verde a todas las Federaciones Autonómicas a que siguieran los pasos de la de Castilla-La Mancha, si bien a la Federación Española parece interesarle más otros temas, como es el dinero de las televisiones, tal y como se desprende de la nota informativa emitida por la RFEF.
Por tanto, la Federación de Castilla-La Mancha, en un farragoso comunicado que no hay por donde cogerlo, anima a los clubes a la "huelga" el 7 y 8 de marzo. Claro que "huelga" sui generis, porque esa "jornada laboral" habrá que "recuperarla" (algo que en las huelgas de verdad, no se debe hacer). Y de eso, de la fecha de recuperar la jornada, poco, más bien nada, se ha dicho, pero es evidente que la fecha que está en mente de todos es la del Jueves Santo, 2 de abril.
Las consecuencias para el Daimiel
Algunos directivos del Daimiel, al conocer la noticia de la "huelga" pues ya han echado cuentas de lo perjudicial que le podría salir al equipo, porque la jornada del 8 de marzo es la de la visita a Daimiel del Albacete B. Si ese partido se juega entresemana en día laborable, la taquilla, ya de por sí escasa, se va a ver mermada a su mínima expresión.
Y si se juega el 2 de abril, Jueves Santo, se mitigará bastante el problema, aunque el siguiente partido es en casa con el superderbi ante el Villarrubia, inédito en Tercera división, e históricamente el Daimiel ha jugado en Sábado Santo cuando le ha tocado jugar en casa el Domingo de Resurrección, para aprovechar los muchos visitantes que en esos días hay en Daimiel.
Pero es que, si ante el Albacete B se juega ese 1 ó 2 de abril (Miércoles o Jueves Santo) el anterior partido del Daimiel será ante el Toledo B, que se prevé sea de a sangre y fuego en lo físico y emocional por lo mucho que, presuntamente, tendrán verdes y blancos en juego. En fin, que ese partido del Albacete B de sandwich entre Toledo B y Villarrubia en Semana Santa no parece que caiga muy bien en el seno del equipo en el aspecto estrictamente deportivo.
Las tarjetas de Quintanar, para Villarrobledo
De igual modo, hay que tener en cuenta que todo aquello que suceda a nivel disciplinario en el partido de Quintanar del Rey, si no se juega luego ante el Albacete B, se tendrá que cumplir en el siguiente encuentro, que es la salida a Villarrobledo.
Nunca se sabe qué es mejor y qué es peor, pero se entiende que los clubes, cuando tomaron aquella decisión de paralizar la Liga, habrán tenido en cuenta todas estas circunstancias que ahora algunos ven de cerca y no, precisamente, para bien del club que rigen.
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