Ocho temporadas después, el Daimiel CF volverá a jugar una Promoción de Ascenso a Tercera División (1-0)

Hay aficionados que aún recuerdan aquella fantástica Promoción de Ascenso a Tercera división que se producía en la temporada 2003/04. El Daimiel de Salva Malagón, que hoy estaba en la pobladísima grada viendo a su Almagro y a su hijo con la elástica roja, tenía que jugársela ante Los Yébenes. Hacía nueve temporadas que el Daimiel no jugaba en Tercera y se produjo un lleno apoteósico en el Estadio Municipal, el mayor todavía hoy, para ver al Daimiel CF. En aquella ocasión el Daimiel realizó un temporadón que no sirvió para quedar campeón porque el Atlético Tarazona, club este ahora desaparecido, se cruzó por medio. Más o menos lo que le ha pasado al CF Talavera de la Reina con el Mora esta misma campaña.

A aquella Promoción, hay que reconocerlo, se llegó con cierto punto de tristeza y resignación porque había un equipazo que no fue suficiente para ser campeón. Hoy, ocho temporadas después, el Daimiel CF se ha clasificado para jugar la segunda Promoción de Ascenso a Tercera división de su historia. Y esta vez se ha celebrado por todo lo alto, porque se ganó al rival directo, con una grada que registró la mejor entrada de la temporada, con una afición volcada y haciendo un esfuerzo encomiable… cuando hace apenas 15 días todo parecía perdido.

Quizá haya sido por eso, porque todo parecía perdido, por lo que se ha celebrado tanto jugar una promoción que deja al Daimiel la puerta entreabierta del retorno a la Tercera división tan sólo dos campañas después del último descenso. No será nada fácil. El rival es de muchísima enjundia, el CF Talavera de la Reina, el conjunto que la inmensa mayoría de talaveranos considera el heredero del Talavera CF, que llegó a militar en Segunda B y que tantos enfrentamientos tuvo con el Daimiel CF en Tercera división. No es momento de hablar de la Promoción, pero sólo un apunte, ya es “mala suerte” que el Daimiel se tenga que jugar el ascenso en la misma temporada con el equipo representativo de la única capital de provincia de España que no tenía a su equipo en Categoría Nacional, y después con el equipo de la segunda ciudad más poblada de Castilla-La Mancha. Tremendo.

El Almagro facilita una alineación con nombres cambiados

No sabemos a quién achacárselo, porque al final del partido bastante compungido estaba Dario, entrenador del Almagro, como para preguntarle por el tema, pero la alineación que el Delegado del Almagro facilitó estaba compuesta por nombres absolutamente desconocidos. Guerra de nervios o no, evidentemente no se sabe a quién querían engañar, si es que esa era su intención. Artimañas que son antediluvianas y que verdaderamente no vienen a cuento. Pero el que dio la orden, sabrá por qué lo hizo. Desde luego aquí van a poder leer los nombres verdaderos de los jugadores del Almagro.

El esquema del Daimiel fue de 4-3-3, tal y como acabó jugando en Miguelturra, con Paco con mucha libertad de movimientos, y Raúl Martín y Francis cambiándose de banda constantemente. Rafa Cortés era la punta de lanza, retornando a la titularidad. Dachu fue el recambio del sancionado Rubio. En el Almagro, el dibujo era de 4-1-4-1 pero muy elástico, sobre todo en ataque. Sergio y Santi Rozas tenían la misión de abrir el campo mientras que Pedro jugaba algo retrasado con respecto a Mario y Luis Paz.

El Almagro tuvo más la posesión de balón, y trató de quererlo jugar, pero lo hacía muy atrás, en su campo, mientras que el Daimiel parecía sentirse cómodo de esa manera. Esperaba al rival, como sabiendo que 90 minutos en el Estadio, son muchos minutos y a estas alturas de temporada la gasolina empieza a escasear. El Daimiel recuperaba el balón en cuanto el Almagro quería dar un paso adelante. Esos robos eran sinónimo de salir rápidos al ataque. Ismael y Paco trataban de conectar con los puntas, pero o caían en fuera de juego, alguno muy dudoso, o la defensa se imponía.

En el Almagro, poco más o menos. Sergio era el más incisivo, pero por arriba el Daimiel era infranqueable, y por abajo Bernal y los centrales se bastaban para abordar el peligro. Los minutos pasaban, los equipos se hacían fuertes en sus planteamientos y las ocasiones no llegaban. Hubo, eso sí, una falta favorable al Almagro, un tanto lejana que tras toque leve, remataba Sergio y salía ligeramente desviado.

El Daimiel no daba señales de peligro, de hecho no botó ni un solo córner en la primera parte, pero en uno de esos robos de balón en la medular, esta vez sí salió bien la conexión. Ismael ve perfectamente el desmarque de Rafa Cortés, este rompe entre Jorge y David, Alberto sale de su marco a la desesperada, Rafa Cortés, le dribla sin dificultad, y a portería vacía establece el 1-0 en el minuto 43. Verdaderamente el Daimiel había sacado petróleo de la primera ocasión que se le presentaba. Y lo hacía en un momento psicológico, cuando todo el mundo pensaba que al descanso se llegaba con empate en el marcador.

El Almagro, sin presencia ofensiva

En la reanudación todo siguió poco más o menos igual, aunque el Daimiel fue perdiendo efectivos, poco a poco, por lesiones de diversa consideración. El primero que se iba a vestuarios era Fernando, que tras caer mal en la primera parte quiso continuar en la segunda pero fue imposible. Chule le sustituía y jugaba de lateral derecho, lugar que hacía un par de temporadas en el que no lo hacía. Tras unos primeros momentos dubitativo, bien es verdad que salió cuando el Almagro más trató de achuchar, luego se entonó.

El Almagro seguía tocando muy atrás y cuando quería dar un paso adelante, daba el pelotazo. Los blancos seguían en su línea de sobria defensa sin pasar apuros. Tras una internada individual de Marcos Vargas, con disparo desviado, llegó la gran oportunidad visitante que no acabó ni en disparo. Y es que un clarísimo fuera de juego no pitado dejaba a Álex solo ante Maxi. Pero no controló el balón, o quiso tirar de primera, y desperdició la ocasión. Todo ello entre una bronca monumental del respetable.

El Daimiel desperdicia ocasiones clarísimas

Aquí se acabó el Almagro que se notó peor físicamente que el Daimiel. Jesús tuvo que sustituir a un Dachu que acusó su más de un mes de inactividad y tuvo que ser sustituido. Bernal bajó al centro de la defensa y Jesús se situó en la media punta. Fue entonces cuando los blancos montaron unas contras mortales de necesidad. La primera fue de Raúl Martín, que se fue de quien quiso se internó en el área, caracoleó un par de veces, no quiso tirar porque vio mejor colocado a Rafa Cortés, y este dispara raso junto al palo y un defensa (había tres bajo los palos) saca a córner. Fue la gran ocasión para el 2-0 en el minuto 70.

Luego, Paco, que había hecho un gran desgaste, también se tenía que ir con un golpe producido con anterioridad. Era el tercer cambio en los locales por motivos físicos. En este caso Gonzalo daba más mordiente y frescura al ataque daimieleño. Y es que por aquí empezó a ganar el partido el Daimiel, al demostrar tener un fondo de armario más sólido que el rival. Otra ocasión clara fue para Jesús, en una pared fantástica con Raúl Martín dentro del área, pero que no vio claro el disparo, quiso caracolear y la perdió.

La expulsión de Ismael

El Almagro tenía la pelota pero no sabía qué hacer con ella, mientras que el Daimiel cada vez que robaba, se plantaba con velocidad en los dominios de Alberto generando ocasiones claras. Los minutos iban pasando y lo cierto es que el Almagro no ofrecía nada de peligro. Es más, los córneres, otrora peligrosos para el Daimiel, se defendieron con solidez. Todo parecía indicar que el partido acabaría muriéndose por la inanición del Almagro y alguna contra mortal del Daimiel. Pero llegó lo inesperado. En una falta como otra cualquiera, Ismael reacciona mal y agarra y tira a un jugador del Almagro. Se forma una tangana y evidentemente Ismael ve la roja directa. Quedaban cinco minutos, pero el descuento iba a ser largo porque el Daimiel había perdido bastante tiempo en varias acciones. Así que el final del encuentro se complicaba.

Aquí el Almagro intentó sacar arrestos, pero siguió todo igual. La impotencia en ataque fue la tónica y las contras, peligrosísimas. Santi, hasta hizo debutar al juvenil Alberto Muñoz, un defensa, que salía por un exhausto Rafa Cortés que se vació corriendo de un sitio a otro. Eso sí, buscó la amarilla por pérdida de tiempo y se “limpió” para jugar la Promoción, lo mismo que Paco. Raúl Martín tuvo el 2-0 a puerta vacía en el 91, tras volver a driblar a Alberto, pero estaba muy lejos de la portería. Y luego Gonzalo, en el 93, también estuvo a punto de conseguir el gol, que no subió de milagro.

Al final, lógica alegría en los jugadores y técnicos del Daimiel, que celebraron junto a la afición la consecución de jugar la Promoción, cuando, repito, hace apenas 15 días nadie daba nada por este equipo. Manteos, duchas y todo tipo de parabienes en un equipo que se lo ha merecido y que consiguió la clasificación ante un digno rival que ha llegado con las fuerzas justas al tramo final de la Liga.

FICHA TÉCNICA

1 DAIMIEL: Maxi, Fernando (Chule, min. 59), Moraga, José Carlos, Dachu (Jesús, min. 64), Ismael, Paco (Gonzalo, min. 71), Bernal, Rafa Cortés (Alberto Muñoz, min. 88), Francis y Raúl Martín (Cala, min. 94).

0 ALMAGRO: Alberto, Jorge, Marcos Vargas, David (Yiyo, min. 87), Ramírez, Pedro, Mario (Tomás, min. 66), Luis Paz, Santi Rozas, Sergio (Salva, min. 59) y Álex.

ÁRBITRO: Grande Sacedón, asistido en las bandas por Sáinz Pardo y Valle Minaya, de la delegación de Cuenca. Mal. No actuó con el mismo criterio y, sin influir en el resultado, tuvo errores de bulto. Enseñó tarjetas amarillas por el Daimiel a Raúl Martín, Moraga, Bernal, Gonzalo, Rafa Cortés y Paco, a este cuando ya estaba en el banquillo. Expulsó con roja directa a Ismael en el minuto 85. Por el Almagro vieron amarilla Santi Rozas, Sergio y Álex.

Gol:

1-0, minuto 43. Rafa Cortés.

INCIDENCIAS: Estadio Municipal de Daimiel. Calabobos antes de empezar el partido y durante el mismo. Tarde fresca y gran entrada. Césped muy bacheado. Más de 800 espectadores con presencia importante de seguidores almagreños. Presencia del alcalde de Daimiel, Leopoldo sierra y de Delegado Federativo a petición del Almagro. El entrenador del CF Talavera de la Reina, Fran Sánchez, estuvo en la grada. La alineación facilitada por el Almagro no se correspondía con los nombres habituales de los jugadores.

LA FOTO DE LA AFICIÓN