No tuvo exceso de confianza el Daimiel Racing frente al Cinco Casas, colista del grupo, por aquello de que los brujos tenían cuatro bajas y no hubo posibilidad de hacer cambios. Sí había ganas de agradar y de sumar, por primera vez en la Liga, dos victorias consecutivas. Eso se consiguió con un resultado muy claro, 3-0. El Racing salió a por todas en el primer tiempo y conseguía dos goles que dejaban casi sentenciado el partido, además, realizando un muy buen juego.
El Cinco Casas apenas ofreció resistencia en el primer tiempo. El dominio brujo fue casi total, aunque quizá con un poco de "miedo" por aquello de que no se lesionara nadie porque solo estaba Constantin (portero suplente) en el banquillo. El coraje, las ganas y el buen juego local fueron una constante en el primer período, todo lo contrario que en la segunda parte, donde el conjunto de Kapa se dedicó a contemporizar y jugar con el resultado, lo que deslució los segundos 45 minutos que fueron para olvidar.
Jony Negrete marcó el primer gol del Daimiel Racing en una gran jugada personal. Unos minutos después sería Pedro el que prácticamente sentenciaba el partido con el 2-0. Pedro fue uno de los destacados en el primer tiempo y trajo en jaque a la defensa del Cinco Casas. Con ese 2-0 acababa la primera parte.
Como decimos, la segunda parte fue muy mala, el Cinco Casas, que realizó cinco cambios, se encontraba más fresco y pasó a dominar la situación, aunque no con verdadero peligro sobre la portería del local Diego. El tercer gol llegaba en las pstrimerías del partido, también por mediación de Pedro.
Lo importante es que el Daimiel Racing conseguía la segunda victoria consecutiva y salía del trance de afrontar un partido con los once justos. A partir de ahora se recuperará a gente que estaba sancionada, algún lesionado y se esperan fichajes de cara al próximo compromiso en Porzuna.
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