Destacada mención merece el retorno a la segunda división del Albacete Balompié, el ascenso a primera división femenina de la Fundación Albacete, y los ascensos a segunda división “B” del Puertollano y Socuéllamos, además del éxito que supone para numerosos equipos de nuestra Comunidad mantener la categoría en las distintas categorías de ámbito nacional. Son la representación de Castilla La Mancha en el exterior y el termómetro de la salud del fútbol castellano manchego.
Cabe resaltar que los dos ascensos a segunda división “B” acarrean unos efectos que repercuten directamente en la composición de las categorías y los respectivos grupos. Así, uno de los ascensos permite mantener la categoría a los equipos que descendieron no por méritos deportivos sino por el descenso de La Roda C.F. a tercera división: C.D. Madridejos, U.D. Tobarra y C.F.Calatrava. Por su parte, el otro ascenso a segunda división “B” supone el acceso a una categoría superior de aquellos clubes que se quedaron a las puertas, a los que alcanzaron el mejor registro después de los que obtuvieron el derecho de ascenso, que son: C.D. Toledo “B” a tercera división, C.F. Almodóvar a primera división preferente y C.D.E. Villaseca de la Sagra a primera división autonómica.
El Daimiel RCF Femenino, que precisamente hoy se ha conocido extraoficialmente que quedará encuadrado en el Grupo V de la Segunda División (equipos de Madrid principalmente), recibirá, por tanto, su copa de Campeón Regional, mientras que el equipo masculino recibirá un reconocimiento por su ascenso a Tercera división. La pena es que el Juvenil del Daimiel no ha podido poner la guinda al pastel con su ascenso a Liga Nacional.
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