Nada menos que siete partidos de sanción le han caído al jugador del Manchego Provencio, Rubén Santos Sevillano (Rubén). El Comité de Competición de la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha ha sido implacable con el jugador que fue expulsado con roja directa en el minuto 84 del partido que enfrentaba a su equipo, el Manchego Provencio, con el Daimiel CF. En ese minuto, Rubén realizó una dura entrada a Bernal por detrás en el centro del campo y sin posibilidad de llegar al balón, por lo que el árbitro del partido, Escobar García, le expulsó con roja directa.
Lo peor vino después, cuando Rubén se encaró con el colegiado y, según el acta, le llegó a zarandear. El Comité no se ha andado con remilgos y le ha sancionado con dos partidos por la expulsión, y con cinco por el zarandeo del árbitro. La resolución completa del Comité de Competición es la siguiente:
DOS PARTIDOS DE SUSPENSION por producirse de manera especialmente violenta con ocasión del juego o como consecuencia directa de algún lance del mismo, originando riesgo pero sin consecuencias dañosas. (art. 156.h.1)
CINCO PARTIDOS DE SUSPENSION por agarrar, empujar o zarandear al árbitro o asistentes, tras haber sido expulsado, motivo por el cual también ha sido sancionado.
En definitiva, una dura sanción para un jugador que quiso tomarse la justicia por su mano y que se excedió gravemente en sus protestas al colegiado.
Por parte del Daimiel sigue sin tener sancionados por tarjetas. En todo lo que llevamos de competición, sólo Vicente se ha perdido un partido por este motivo, ya que fue expulsado por doble amonestación en la segunda jornada ante el Puertollano B.
Lo peor vino después, cuando Rubén se encaró con el colegiado y, según el acta, le llegó a zarandear. El Comité no se ha andado con remilgos y le ha sancionado con dos partidos por la expulsión, y con cinco por el zarandeo del árbitro. La resolución completa del Comité de Competición es la siguiente:
DOS PARTIDOS DE SUSPENSION por producirse de manera especialmente violenta con ocasión del juego o como consecuencia directa de algún lance del mismo, originando riesgo pero sin consecuencias dañosas. (art. 156.h.1)
CINCO PARTIDOS DE SUSPENSION por agarrar, empujar o zarandear al árbitro o asistentes, tras haber sido expulsado, motivo por el cual también ha sido sancionado.
En definitiva, una dura sanción para un jugador que quiso tomarse la justicia por su mano y que se excedió gravemente en sus protestas al colegiado.
Por parte del Daimiel sigue sin tener sancionados por tarjetas. En todo lo que llevamos de competición, sólo Vicente se ha perdido un partido por este motivo, ya que fue expulsado por doble amonestación en la segunda jornada ante el Puertollano B.
No hay comentarios:
Publicar un comentario