El primer partido de Liga del Daimiel CF resultó decepcionante. Los de
Rimun merecieron la derrota en el Municipal de Mota del Cuervo, tras unos inicios correctos y esperanzadores, llegó el gol del Mota del Cuervo que noqueó totalmente a los daimieleños. La segunda parte es para olvidar cuanto antes, en especial los últimos minutos, donde el Mota del Cuervo desarboló por completo a un Daimiel a la deriva. Además de la derrota, el Daimiel se viene de Mota del Cuervo con la expulsión de
Ismael, por doble amarilla en el minuto 92, por una falta en el centro del campo que no venía a cuento.
La conclusión que hay que sacar de este encuentro es que en Preferente, y lo hemos dicho hasta la saciedad, hay que currárselo en todos los partidos. Los encuentros como el de hoy en Mota del Cuervo van a ser la norma en muchísimos campos. Equipos aguerridos, respondones, que no les tiembla el pulso por jugar al balonazo, férreos, incluso duros, con árbitros indolentes... pero eso es lo normal en todos los campos. Cuanto antes lo empiecen a asumir los jóvnes jugadores de la plantilla blanca, mejor.
El Daimiel salió de inicio con un 4-2-3-1.
Rimun sigue apostando por centrales reconvertidos a laterales, como
Rubio y
Moraga, lo que encierra el riesgo de que sus subidas no sean del todo efectivas a la hora del centro.
Quesada e
Ismael configuraron los pivotes, mientras que
Francis y
Willow se situaron en las bandas.
Jesús en la media punta con
Dani Gómez en la punta de lanza. Enfrente se situó un Mota del Cuervo con mucho respeto 4-1-4-1, con
Andrés haciendo un marcaje especial a
Jesús, al que no le dejó ni a sol ni a sombra.
Buen comienzo blanco
Hay que reconocer que el Daimiel comenzó muy bien, presionando la salida del balón local y teniendo casi siempre la posesión del mismo. El dominio era claramente visitante y el Mota del Cuervo no existía en ataque. Los de
Ignacio Galindo no podían quitarse de encima la presión blanca, pese a sus numerosos pelotazos y contínuas faltas, sobre todo del veterano
Cobo que no paró de “rezarle” al trencilla durante todo el partido. El Daimiel tuvo sus oportunidades en las botas de
Moraga. El primero a la salida de un córner en un duro disparo a media altura que atrapó el meta Edu. Mejor fue la falta que sacó el lateral en el minuto 21. Durísimo disparo que parecía que entraba, pero
Edu sacó la mano salvadora en el último instante para enviar a córner.
El gol del Daimiel parecía cuestión de tiempo porque todo el control del juego era visitante. Pero faltaba lo de siempre, el remate o el último pase que diera opción a la oportunidad definitiva. Pareció llegar en el minuto 27. Fue la mejor ocasión del Daimiel en todo el partido.
Rubio habilita a
Dani Gómez entre los dos centrales y se queda solo ante
Edu. Con todo a favor el delantero daimieleño estrellaba la pelota en la pierna del cancerbero que salvaba lo que parecía el 0-1.
Gol desde el saque de banda
Pero lo que era un partido controlado, pasó a ser un verdadero descontrol. Sólo dos minutos después del posible 0-1, el Mota del Cuervo saca de banda,
Florin prolonga en el punto de penalti, y
Pichi, en el segundo palo completamente solo, marca de remate de cabeza. Era la primera llegada del Mota del Cuervo y acababa en gol. Fue un mazazo terrible para un Daimiel que tenía todo controlado, pero que se fue como por ensalmo, del partido. El Mota del Cuervo, equipo con un manejo de balón muy tosco, se envalentonó, y, al contragolpe, pudo aumentar la cuenta antes del descanso, primero con un disparo de
Florín, que hizo intervenir perfectamente a
Astillero, y luego un remate de
Pichi, el más peligroso de su equipo, se estrellaba en el poste, cuyo rechace le caía a
Florín, que con toda la portería para él, la echaba fuera.
Los blancos pasaban por malos momentos, pero lograron rehacerse. Antes del descanso
Moraga obligaba a
Edu a lucirse, pero el descanso era la mejor medicina para un Daimiel que había perdido el sitio tras el gol de
Pichi.
Segunda parte para olvidar
Había esperanzas en que el Daimiel lograra volver a controlar el juego en la segunda parte. Cierto es que dominó, pero ante un equipo tan rocoso, cerrado y con las ideas tan claras como el Mota del Cuervo, hacía falta mucha más combinación, toque y rapidez que la que ofreció el Daimiel. Ni una sola ocasión de peligro en los segundos 45 minutos. Eso dice todo de un Daimiel que deambuló sin ofrecer nada para sacar algo positivo del Municipal moteño. Demasiados balones a la hoya, falta de profundidad por las bandas, escasa presencia de los hombres del medio campo, errores en las entregas. En fin, un cúmulo de circunstancias que se iban acumulando a la propia impotencia, por las pérdidas de tiempo deliberadas del equipo local, tanto en cada una de las faltas como cuando cada vez que salía el balón por banda.
Nada nuevo, lo normal en un partido fuera de casa que el Daimiel nunca supo enderezar. Ni siquiera el cambio de
Alberto García por
Dachu, que hizo que
Quesada retrasara su posición a la de central.
Rimun quiso jugar con un 4-1-4-1, pero no dio resultado.
Francis y
Willow jugaban cada vez más lejos de la portería, y los últimos 20 minutos del Daimiel fueron de lo peor visto hasta ahora. El equipo se partió en dos y los moteños llegaban en oleadas, como las hordas bárbaras, cada vez con más peligro. A poco que el Mota del Cuervo hubiese tenido jugadores de una mínima calidad arriba, los blancos se hubieran traído, como vulgarmente se dice, un saco.
Minutos “horribilis” y expulsión de Ismael
Sólo entró uno, el de
Florín en el minuto 81, pero ya antes el propio
Florín había mandado un balón al larguero (el segundo palo de los moteños) cuando lo fácil hubiera sido marcar. El Daimiel pedía a gritos que acabara ese suplicio. Perder por 2-0 era un mal menor. Pero hubo algo peor, la expulsión de
Ismael en el minuto 92 por una falta en el círculo central. Así que el Daimiel perdió los tres puntos y a un jugador para el derbi del domingo ante La Solana.
En definitiva, partido con un antes y un después, pero que deja un poso de decepción por la pésima segunda parte realizada y que debe servir para concienciar a todos que esta Liga va a ser muy complicada, que hay muchísima igualdad, que en Regional hay que ponerse a trabajar desde el minuto 1 porque con el nombre no se ganan los partidos, y que, desde luego, en el aspecto ofensivo
Rimun tiene mucho trabajo por delante.
FICHA TÉCNICA
2 MOTA DEL CUERVO: Edu, Pablo, Borja, Cobo, Pichi (Ramos, min. 83), Andrés, Florín, Gabri, Héctor, Barrena (Chanche, min. 64) y david (Dani, min. 65)
0 DAIMIEL: Astillero, Rubio, Moraga, José Carlos, Dachu (Alberto García, min. 58), Quesada, Francis, Willow, Dani Gómez, jesús (Adri, min. 82) e Ismael.
ÁRBITRO: Sánchez Hernández, asistido en las bandas por García López y Gómez Rubio, de la Delegación de Albacete. Aceptable. Enseñó tarjetas amarillas por parte del Mota del Cuervo a Pichi, Cobo, Andrés, Barrena, Edu y Gabri. Por parte del Daimiel la vieron Dachu, Quesada, Alberto García y Astillero. Expulsó, por doble amonestación a Ismael en el minuto 92.
GOLES:
1-0, minuto 29. Pichi.
2-0, minuto 81. Florín.
INCIDENCIAS: Campo Municipal de Mota del Cuervo, de césped artificial en muy buen estado. Tarde calurosa. Presenció el partido Ángel Izquierdo, entrenador de La Solana y próximo rival del Daimiel.
